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d e l    c a s t I l l o

Apellido cuyo Linaje es originario de las Montañas de Santander, desde muy pronto se extendió por el resto de España e Islas Canarias.

Este Linaje tiene su origen en la Casa de los Venero. Estos tenían su Solar en un lugar llamado "castillo" (hoy perteneciente al ayuntamiento de Arnuero, partido judicial de Santoña) y de este Solar era Señor, en tiempos de don Bermudo I y de don Alfonso II, el Casto, el ricohombre de estos monarcas Sancho Alfonso de Venero, verdadero progenitor del Linaje de los Del Castillo.

Las Ramas que salieron de las Casas del lugar del castillo (Santander) y de la Villa de san Clemente (Cuenca), difundieron el apellido por España en Salamanca y Zamora. También tuvo asientos este Linaje en Medina del Campo (Valladolid). Otras se extendieron por toda Castilla la Vieja. Los Del Castillo establecidos en Vizcaya procedieron directamente de Santander y fundaron nuevas Casas en el Valle de Arcentales. En la Merindad de Arratia; en la Anteiglesia de Castillo de Elejabeitia, del partido judicial de Durango, en la de Abadiano, del mismo partido; en Elejabeitia, barrio de Durango y en las Encarnaciones.

También se extendieron los Del Castillo por Aragón, Soria, La Rioja y Navarra. En Aragón hubo Casa de Del Castillo, de notoria Nobleza, en la Villa de Tauste, del partido judicial de Egea de los Caballeros (Zaragoza).

Una de sus líneas se estableció en Zaragoza y de ella fue el Caballero de Santiago Doctor Micer Jaime del Castillo, que ingresó en dicha Orden en 1558.

Otra Casa aragonesa de Del Castillo radicó en la ciudad de Jaca (Huesca) y sus líneas se extendieron a Cataluña. También tuvo línea en Tudela (Navarra).

La Casa de Soria, sita en el lugar de Lubia, tuvo igualmente línea en Navarra, en la Villa de Valtierra, del partido judicial de Tudela.

En La Rioja hubo Casa de este Linaje, en la Villa de Briguera, del partido de Logroño, con línea en Llerena (Badajoz), de la que fueron el Caballero de Carlos III Mateo del Castillo González Orduña.

Otra línea Navarra tuvo asientos en la Villa de Lerín, y de ella fueron Juan Antonio del Castillo de las Peñas y Palacios, secretario del Secreto de la Inquisición de Granada, donde se avecinó, y su hijo José Antonio del Castillo de las Peñas y López de Heredia, natural de Granada y Caballero de la Orden de Santiago, en la que ingresó en 1747.

Como tantos apellidos, la base de este ha sido bastante discutida por los tratadistas. Algunos sostienen que se apoya precisamente en las construcciones que así se denominaron y que alcanzaron su máximo apogeo durante la Edad Media. Por lo que se sabe el origen de los castillos como fortalezas de defensa ya se conocía en la mas remota antigüedad empleándose en los tiempos de los asirios y fue el rey Argón (siglo VIII antes de Cristo) quien mayor impulso dio a este tipo de recintos amurallados. En Roma, el emperador Diocleciano hizo edificar en Dalmacia un castillo que era tan grande como una ciudad entera. Este tipo de fortalezas en latín se denominaron "castellum" y en ello es lo que algunos han creído ver el origen del apellido. Otros alegan al nombre propio de Castillo, también romano atribuyéndole los antecedentes de Castillo. En realidad, nada de todo lo anterior puede asegurarse, ya que no existen las más elementales garantías para poder afirmarlo con la debida autoridad. Existe también la versión de que el apellido se originó cuando a determinado Señor Feudal, tuviera el nombre que tuviera, los villanos, o sea el pueblo llano, se referían a él denominándolo simplemente como "el Señor del Castillo", dada la clase de vivienda donde el noble vivía.

Los miembros del apellido Del Castillo probaron repetidas veces su nobleza en las Ordenes de Calatrava, Santiago, Alcántara, Montesa y Carlos III así como en la Real Compañía de Guardias Marinas.

Los títulos que este Linaje lleva son los siguientes:

Don Rodrigo del Castillo y Torres, fue creado Marqués de Casa Castillo, en 1761
Don Fernando del Castillo y Ruiz de Vergara, Conde de la Vega Grande de Guadalupe, en 1777
Don Ignacio del Castillo y Gil de la Torre, Conde de Bilbao con Grandeza de España, en 1887

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